Cuando tropecé contigo.


Kate Mackenzie, una idealista representante de recursos humanos en el periódico New York Journal, ha sido forzada por su maldita jefa, Amy Jenkins, a despedir a Ida López, la popular empleada que maneja el carrito de dulces en la cafetería de la empresa.

Ida prepara tortas y galletitas deliciosas, pero se niega a servirle al pedante abogado Stuart Hertzog, asesor legal del diario, el prometido Amy, conocida como la T.P.M. (Tirana Perversa y Maldita), apodo que han inventado Kate y su mejor amiga y compañera de trabajo Jen.

Ida presenta una demanda legal por despido injustificado, y el estudio de abogados de Stuart y su hermano menor, Mitch, deberán manejar este delicado caso. Pero a Mitch realmente le preocupa más que se haga justicia que como sale parada del embrollo la novia de su hermano.

Kate debe asistir a las entrevistas previas al juicio y allí conocerá a Mitch. El representa todo lo que ella odia, básicamente porque es abogado.

Cuando Amy trata de culpar a alguien por el despido injustificado elige como víctima a Kate. Mitch tendrá que apelar a la ayuda de sus ex clientes convictos para salvar a la muchacha que lo ha deslumbrado.

Un moderno cuento de hadas urbano, en el marco de una comedia donde la familia de Mitch y los amigos de Kate se entrelazarán en una interminable cadena de cómicos equívocos. En un trabajo casi artesanal la autora entremezcla los e-mails, mensajes electrónicos , llamadas telefónicas , cartas documentos y memorándums de la empresa con el diario personal de Kate para armar el hilo de la historia. Ustedes se preguntarán: cómo escribir una comedia romántica con esos elementos. Y la respuesta es: sólo Meg Cabot podía hacerlo.

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