Brillantes Tejidos


Para agradecerle este regalo, a Wayland North se le ofrece una recompensa, cualquier cosa que desee... y Sydelle es la más sorprendida cuando, sin explicación, la elejida es ella. Arrebatada de su hogar, Sydelle no necesita que le den razones para que North le desagrade. Bebe mucho y se baña poco, y si eso no fuera suficiente para enloquecerla, North raramente usa la magia que tan orgullosamente clama poseer. Aun asi, ella no tarda en darse cuenta que hay raro en el mago, quien la protege ferozmente a ella y al secreto de una maldición que vuelve sus miembros en siniestras sombras y lo deja en agonia. Desafortunadamente, sus oportunidades para preguntar son escasas.
Sydelle Mirabil es la prueba viviente de que con una sola gota de lluvia una vida puede ser cambiada para siempre. Ubicada en el lugar más lejano del reino, su pueblo ha sufrido una extraña e inacabable sequia. Al menos hasta ese día cuando un mago llegó y trajó la lluvia con él.
Además de los extrañamente fuertes terremotos y tormentas que circundan su camino atravez del reino, otros magos tambien empiezan a mostrar un inexplicable interes en ella, lo cual resulta en una serie de duelos mortales. Frente a los vientos de guerra e incerticumbre, Sydelle se da cuenta de que estos eventos no son tan alazar como pensaba, que ninguna maldición, ni siquiera la de Wayland North, es tan terrible como la que ella misma parece poseer.

0 comentarios:

Gracias por comentar
"Las palabras vuelan, lo escrito permanece"