Matar a un Vampiro

Los Burke, tras veinte años afincados en España, se ven obligados a regresar a Londres en 1838. Allí rehacen sus vidas hasta que la hija pequeña del matrimonio fallece en extrañas circunstancias.

El doctor White, amigo de la familia, no deja pasar por alto unas marcas en el cuello de la niña y la pérdida considerable de sangre. Cuando una segunda muerte confirma sus sospechas, le confía a Wilhelm, el mayor de los hermanos Burke, que quien está detrás de los asesinatos es un vampiro, al que tratarán de matar con todas sus fuerzas.

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