¿COMO OLVIDAR A MI EX?

1-Deshazte de todo aquello que te pudiera hacerte recordar al ex.

Obviamente, borrar de la mente aquellos recuerdos lindos de una relación nos podría resultar un tanto complejo debido al extraordinario poder de registro de la memoria. Muchos de estos recuerdos se internan estratégicamente en el subconsciente. Sin embargo, como si hacemos caso omiso a la frase popular de que: Ojos que no ven, corazón que no siente, podríamos empezar a borrar cosas de nuestra mente desechando todo aquellos objetos y cosas que, de una manera u otra manera, nos hacen evocar momentos agradables de la relación -cuando todavía Cupido estaba de nuestro lado-. Por lo que debemos atacar al enemigo por lo más visible. Así que debes empezar a arrojar al bote de la basura todo lo que te podría hacer recordar a tu ex. Arremete pues contra fotos, peluches, cartas, tarjetas, ropas, bisuterías. Cuando un ejército poderoso logra penetrar a territorio enemigo con el fin único de hacerlo desaparecer de la faz de la tierra, lo primero que hace es saquear sus riquezas, tomar a las mujeres, aniquilar a los más soldados más temibles, hacer prisioneros a los más venables y convertirlos en esclavos, y finalmente incineran todo a su paso. Queman todo aquello es considerado sagrado para el pueblo yugulado: sus ídolos, sus imágenes, sus estatuas, sus templos, sus dioses de barro. Todo lo destruyen. Todo lo pulverizan. ¿La razón? Para que a nadie se le ocurra evocar recuerdos de sus adoraciones y hábitos, para que no se revelen tan fácilmente, para imponer nuevos ideales. Las mal llamadas Guerras Santas impusieron a punta de espadas sus ideales. Los europeos redujeron casi a nada toda una raza, con todo y sus cemíes y culturas, cuando pisaron en el Nuevo Mundo y finalmente impusieron el orden que ellos que querían en el nombre de sus dios cristiano.
Pero ¿se podría aplicar esta actitud devastadora en el amor fallido? ¡Por supuesto que sí! Obviamente los terrenos son distintos, pero el objetivo es el mismo: reducir al enemigo e imponer un nuevo orden, el orden que más le conviene al corazón: EL OLVIDO. Dime ahora, ¿Para qué conservar todo aquello que innecesariamente te hará recordar a quien ya no aporta nada sano a tu salud mental? ¿Para qué guardar los ídolos de un dios falso y despiadado? ¡Absurdo! Así no te aferres a un pasado que no merece ser recordado, por lo que debes despojarte de todo apego materialista para esta noble causa. ¡Total, nada te llevarás cuando te mueras! En el caso de propiedades de mayor valor económico, busca un modo de vender una parte, regalar otra y así renovarlo. Recurre a un abogado para que te ayude manejar el asunto como manda la Ley. Es peliagudo, pero beneficioso para tu alma. Repito no conserves nada que te vaya a ser recordar a tu ex. ¿Desde qué momento? ¡Pues desde este mismo instante!
Ah, otra cosita muy importante, no te detengas mezquinamente a pesar en el valor económico de las cosas de las que desharás, recuerda sólo dos asuntos verdaderos: 1-Tu paz espiritual no tiene precio. 2- Más se perdió en el Diluvio. Regálate el arcoíris de la paz interior.

2-Aléjate de aquellos lugares donde tú y tu ex solían estar juntos.


¿Por qué? Pues muy sencillo. ¿Qué hace la gente cuando pasa por una iglesia? Pues pensar en su dios y todo lo relacionado con la divinidad. ¿Qué hace la gente cuando pasa por un cementerio? Pues pensar en la muerte y todo lo relacionado con la parca. ¿Qué hace la gente cuando pasa por un motel? Pues en sexo y todo lo relacionado con acto sexual. ¿Y qué harías tú cuando pases por aquel lugar donde por primera vez tú y tu ex se dieron el primer beso? Pues suspirar por tu ex, como es lógico. Cuando una relación amorosa acaba, con ella debe acabar también todo aquello que la pudiera hacer recordar. Todo debe renovarse.
La vida es como una Y (i griega), que empieza con un camino, pero luego se no va bifurcando hasta tendernos dos caminos, los dos se parecen, pero sólo uno nos conviene andar. Así es el amor cuando termina: Dos caminos parecidos, uno ya ha sido transitado y el otro todavía, pero uno sólo nos conviene tomar a nuestro riesgo. Nadie obliga a nadie a tomar el camino viejo o el camino nuevo. Esa es una decisión muy personal. Ambos caminos están llenos de señales un tanto ambiguas que sólo el corazón sabe interpretar. Es decir, cada quien sabe lo que le conviene y lo que no le conviene. Nadie está dentro del otro como para saber qué el sabor de la angustia ajena, es verdad. Pero del mismo modo, sólo uno sabe cuán catastrófico puede resultar volver a pisar el mismo camino de abrojos y yerbajos por el que una vez se anduvo con ingenuidad. Cada quien se convierte, al menos una vez en la vida, en su propia Alicia en su propio país de las maravillas. A cada uno de nosotros le ha tocado soñar, ir detrás de conejos blancos, mariposas y cosas extrañas como lo hizo Alicia en su cuento. Pero, como es natural, los sueños nunca son eternos, por lo que debemos despertar de ellos, y retornar a nuestra realidad.
El amor nos convierte en eso a nosotros, en soñadores que van correteando alocadamente tras sus grandes aventuras. Eso hasta ahí es bueno. Lo malo empieza cuando nos despertamos de ese sueño y nos encontramos que debemos enfrentar nuestra realidad, la cual muchas veces, no es tan agradable. No todo el mundo sabe luchar contra sus circunstancias y se dejan convertir en una mierda y peor aún. Pero sé, que tú que estás leyendo estas sugerencias sí puedes sobreponerte de tu caída. Sé que puedes, porque el hecho de que estés en búsqueda de sugerencias para sacar de tu pecho lo que te está asfixiando es razón suficiente de una persona que desea algo a voluntad propia.
Reitero que debes alejarte de todos aquellos lugares en donde tu y tu ex compartieron, ya que los mismos pueden convertirse en aquellos círculos de torturas de la Divina Comedia de Dante Alighieri. Pasar por ellos es provocarte miles de suplicios sin necesidad. Así que hasta un gran favor, no pases por esos lugares ya lúgubres ahora, aléjate de ellos. Sin embargo, si crees que para llegar al paraíso de tu paz interior debes pasar por el purgatorio de tus desdichas y por el infierno de tus recuerdos, entonces hazlo, pero aun así, no te lo recomiendo. Esta actividad catártica no es para todo el mundo.
Te lo aseguro, desde el mismo momento que pases por uno de esos lugares en lo que solías compartir momentos agradables con tu ex, desde ese mismo instante te asaltará un suspiro de: “Ah, fulano (a), la vida.” ¡No caigas en la trampa! O retornarás a algo que ya no le conviene a tu equilibrio mental y sentimental. Que se pierda cualquier cosa, menos tu dignidad. Desde este momento todo camino por el que desees pasar debe ser nuevo. En este sagrado momento de tu vida, tienes frente a ti un camino bifurcado. Tú decides si seguir el camino que ya conoces y que sabes bien a donde te llevará, o si tomar un camino distinto, y escribir tu historia de amor por senderos más promisorios, con menos malezas y con menos ortigas.

3-Corta el mínimo medio de comunicación con tu ex.

Una de las tácticas más efectivas que implementan en la guerra en pos de la victoria es cortar cualquier medio de comunicación del enemigo. Obstruir sus caminos, derribar sus puentes, cortar sus cables telefónicos, averías sus satélites, cerrar los canales televisivos y radiodifusores, hacer presos a los heraldos o carteros. Todo, absolutamente todo debe ser eliminado. De igual manera, para lograr tus objetivos contra tu ex, cierra la mínima brecha de comunicación con tu ex: Cambia tu número telefónico, tu dirección de e-mail, si te envía una carta, no la abras. ¡Contén la curiosidad y tírala al zafacón! Hay seres especialistas en el arte de la persuasión. Son maestros de la hipnosis. Sus palabras son como las que uso la serpiente para persuadir a Eva a que pecara. El escenario que deberás enfrentar se parecerá mucho al mismo que tuvo que enfrentar Jesús de Nazaret durante 40 días en el desierto. Repasémoslo un poco.

Evangelio según san Mateo 4:1-11
"Entonces fue llevado Jesús por el Espíritu al desierto para ser tentado por el diablo. 2 Y, habiendo ayunado cuarenta días y cuarenta noches, al fin tuvo hambre. 3 Y acercándose el tentador, le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan. 4 Pero él respondió, diciendo: Escrito está: “No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.” Le llevó entonces el diablo a la Ciudad Santa, y, poniéndole sobre el pináculo del Templo, 6 le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate de aquí abajo, pues escrito está: “A sus ángeles encargará que te tomen en sus manos para que no tropiece tu pie contra una piedra.” 7 Le dijo Jesús: También está escrito: “No tentarás al Señor tu Dios.” 8 De nuevo le llevó el diablo a un monte muy alto, y mostrándole todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, 9 le dijo: Todo esto te daré si de rodillas me adoras. 10 Le dijo entonces Jesús: Apártate, Satanás, porque escrito está: “Al Señor tu Dios adorarás y a Él solo darás culto.” 11 Entonces el diablo le dejó, y llegaron ángeles y le servían".
Es muy posible que al igual que a Jesús te ocurra a ti con tu ex (Satanás). Primero tu ex sabrá identificar cuándo tú estarás sintiendo hambre de amor y tu ex algo más, y aprovechará la ocasión y se acercará a ti y te dirá con palabras melosas: Si una vez me amaste de verdad, ven, regresemos a lo nuestro, convierte este cuerpo mío en pan de sexo y cómeme como lo hacías antes. En ese momento deberás contestarle con mucha sinceridad:
Escrito está en mi corazón: no sólo de tu sexo vivirá mi cuerpo, sino de amor verdadero y sincero el que por su puesto, ya tú no sabes dar. Entonces si tuvieron un hijo, tu ex te dirá con gran treta verbal: Si eres un(a) buen(a) padre/madre, vuelve a mis brazos, pues escrito está: Si no estamos juntos, el hijo sufrirá. Y tú entonces le contestará con voz templada: También está escrito en el libro de la verdadera familia: Es mejor para el hijo unos progenitores separados y viviendo en paz, que un matrimonio donde no existe ni amor ni respeto mutuo. Y como última jugada, tu ex te ofrecerá villas y castillas, para ver si te convence de una vez por todas, pero tú serás más fuerte que esas débiles promesas y le dirás con firmeza: Apártate de mi embustero, porque escrito está en mi alma: Al amor sincero sólo adoraré y solo a él daré culto.
Luego veras como se acercarán los alcahuetes y celestinas a tratar de convencerte de que vuelvas con tu ex, por esto o por aquello. A estos ángeles negros, cual hizo el arcángel San Miguel con Lucifer, mándalos al carajo sin miramiento. Estos individuos sí que saben manipular la situación para que caigas en un abismo que ni ellos mismos desearían caer. El punto es que no exista ningún tipo de enlace entre ambos. Todos sabemos que cuando una relación amorosa se arruina, si hay algún arreglo sentimental en ambos, existe una altísima probabilidad de que, con el correr del tiempo, las cosas cambien, pero de mal a peor. No es pesimismo, los números no mienten.
Es sabido que cuando alguien se interesa por componer una relación, promete hasta lo que no tiene. Cambia su actitud de una incomprensiva a una totalmente arrepentida y sumisa, todo por alcanzar su objetivo egoístamente. Las primeras semanas son naturalmente de entendimiento y mimos, pero pasados unos meses, al gatito sumiso le van saliendo las uñitas hasta convertirse en garras mortíferas de pantera. Como dice José José: “Lo que un día fue no será.” El amor no cambia su generosidad, pero la gente sí. Para esto, los seres humanos somos, verdaderos actores.

4-Múdate de la comunidad lo más pronto posible o tendrás a todo un barrio preguntándote por tu ex.

¿Recuerdas el difícil éxodo por el que tuvieron que pasar los israelitas guiados por Moisés? Todos decidieron marcharse y dejar todo atrás. ¿Motivado por qué? Por el deseo de libertad. Porque no querían ser más esclavos. Porque no querían vivir en cautiverio. Porque querían servirle a un dios de bondad y amor y no a dioses creados de barro. Y aunque pasaron más de cuarenta años vagando por el desierto, pasando de todo en esa arriesgada travesía, tan solo por alcanzar La Tierra Prometida. Al final, lo lograron. Valió la pena el sacrificio. Sufrieron al principio, pero ya eran hombres y mujeres libres, en una tierra de abundancia y sagrada.
Como en Egipto, el acoso será casi insoportable hacia ti. ¿Por qué? Porque el vulgo se entretiene con las desgracias de los demás. Porque quien no sabe construir, destruye.
Mientras algunas personas aprovecharán la ocasión para pasarse como agentes infiltrados, con el fin vil de llevarte toda clase de chismes sobre tu ex, otros empezarán a resaltar las “cualidades” de tu ex, a tal grado que, poco a poco, tú mismo (a) empezarás a considerar una posible reconciliación con tu ex. Pero, como los israelitas al Faraón, por más lindo que te pinten el panorama, recházalo de tajo. No vuelvas a tropezar con la misma piedra y con el mismo pie. Mira hacia delante, y camina hacia tu verdadera tierra prometida. Tu futuro queda hacia delante, nunca hacia atrás.
Si tu ex vive cerca en tu misma comunidad, o en cerca de la misma, no lo dudes, haz tus maletas y múdate de ese lugar, el cual no te ayudará en tu sagrado proyecto de olvidar esa relación perniciosa. En tu retirada evita mirar hacia atrás (hacia tu pasado) para que no te ocurra lo que le pasó a la mujer de Lot en Sodoma y Gomorra que por matar la curiosidad miró hacia atrás y se convirtió en una estatua de sal para siempre. Vete lejos, mientras más lejos mejor. Los psicólogos aconsejan siempre retirarse a un lugar tranquilo y lleno de aire, el campo es una buena opción. En el camino a tu nuevo recinto, escribe una lista de aquellos defectos de tu ex y repásalos una y otra vez hasta que se te queden grabado en la memoria, de tal modo que recuerdes los malos ratos que viviste a su lado. No dejes que la hiel de aquella mala experiencia se te mezcle con la miel de la ilusión. No le des tregua a tu debilidad humana para volver a lo mismo de siempre –perder tiempo- en un mundo que te ofrece millones de oportunidades para alcanzar la felicidad. Míralo de este modo: perdiste un pez, pero el mar está repleto de miles de millones de peces. Donde quiera existe una oportunidad para buscar la felicidad.

5-Reanuda los vínculos de tu amistad con tus viejos amigos.

El filósofo griego Platón, una vez dijo: "Los amigos se convierten con frecuencia en ladrones de nuestro tiempo". Y es que ciertamente, los amigos llenan un espacio importantísimo en nuestras vidas. Los verdaderos amigos siempre están ahí, justo cuando más lo necesitamos, para consolarnos, para apoyarnos, para revivir momentos de alegría, para hacernos olvidar las amarguras de la vida. Además, recuerda que antes de tu ex llegar a ti, ya tú vivías. Así que ahora que eres libre otra vez, reúnete con tus amigos de antes, pero no para usarlos como escudo con el propósito de evadir tu desventura, sino como lo que son: amigos de verdad, de esos que siempre te dan una palmadita en el hombro, mientras te dicen: “No te desanimes, estamos contigo.” Si te fijas bien en los superhéroes de La Liga de la Justicia Internacional: Supermán, Batman y Robin, La Mujer Maravilla, Aquamán, Linterna Verde, Hawkman, etc, concluirás que uno de los secretos de esos superhéroes radica en que mientras luchan por la justicia y la paz del mundial, a veces se enamoran, pero siempre terminan por reunirse con los amigos.
Por lo tanto tú, haz lo mismo, mientras se van curando las heridas, reúnete con tu Gran Liga de la Justicia (tus cuates) y disfruta con ellos de tu libertad en grande, pero sin caer en el libertinaje que siempre daña y empeora las cosas. Vive intensamente esos momentos que te ofrece la vida con esos amigos de verdad. Alégrate cada mañana de quien eres ahora y de lo que puedes hacer en lo adelante. Es muy seguro de que el Creador esté intercediendo en todo esto para que tú logres alcanzar la felicidad plena con alguien tan especial como tú. No permitas que una sola persona en el universo te convierta en una flébil porquería. Nadie está llamado a ser dueño de nadie. ¡Abajo los sistemas esclavistas y las obsesiones enfermizas! ¡Abajo los celos absurdos! ¡A la mierda con sus falsas promesas! No derrames ni una lágrima más por lo que ya no vale la pena seguir pensando. ¡Ríe porque ahora eres libre para elegir algo mejor!

6-Aléjate de las canciones y mensajes que te invitan a la amargura y al suicidio.

Así es, hay miles de canciones con millones de mensajes subliminales ocultos entre sus letras. Canciones llenas de maleficios y líricas que incitan a la perdición y a la muerte. Sus mensajes pasan inadvertidamente por las mentes de las personas, y luego se van internando lentamente en el subconsciente (su célula huésped) y desde allí empiezan a incubarse y reproducirse como un virus letal. Son virus que matan lentamente. De modo que debes prohibirte escuchar canciones virales con frases tales como: “Me quiero morir”. “Desde que te perdí mi vida es un infierno”. “La vida sin ti no vale nada”. “Me haces falta”. “Sin ti me muero”. Reduce esto al mínimo. Escucha en vez, música alegre o de superación personal. O esas canciones religiosas con mensajes como el siguiente: “Puedes tener paz en la tormenta.” “Camina siempre adelante”. “A partir de mañana (ahora) empezaré a vivir la mitad de mi vida”. “Hoy puede ser un gran día.” “Color esperanza”. “Sueña”. “Gracias a la vida.” En Youtube hay miles de canciones y mensajes de superación personal que pueden ayudarte inmensamente a fortalecer tu espíritu. En las librerías existen un sinnúmero de libros de autoayuda que pueden hacer magia en tu vida. Las puertas de la iglesia de tu preferencia siempre están abiertas para cuando desees escuchar los mejores mensajes de vida para ti, totalmente gratis.
Con el fin de recordarte que hay miles de millones de razones para seguir Todo esto te fortalecerá el espíritu y te alejará de la tramposa melancolía. Húyele a la tristeza como Satanás a la cruz. Hazte el favor de no escuchar nada mustio. Esto será un sacrificio que luego tú mismo lo admirarás y te lo agradecerá para el resto de tu vida. Porque sencillamente te le zafaste a la terrible nostalgia, madre de toda reconciliación infructuosa.

7-Cambia tu imagen por fuera y por dentro.

Dicen que vestir bien causa efectos secundarios, y es cierto. Por lo tanto, es hora de que saques tiempo para el ser más importante en todo el Universo: tú. A veces ocurre que por andar uno más pendiente del otro se descuida uno mismo. El dinero lo gastas en los compromisos que se contraen cuando se tiene una pareja. Y no es que se quiera, es que los gastos surgen naturalmente, esto sin mencionar a algunos miembros oportunistas de la pareja, quienes siempre están en mala, y recurren al banco más cercano y seguro a pedir sus préstamos: a ti. Prestamos que muchas veces nunca se llega a pagar. Y entre este compromiso y el otro nuestra imagen se ve perjudicada.
Vivir solo por un tiempo nos da esa ventaja, la que no solemos disfrutar a nuestras anchas cuando vivimos en pareja. En momentos de crisis económica, cuando los impuestos nos torturan el cochinito de ahorros y la pareja que tenemos no aporto mucho, una ruptura amorosa, más que una tragedia es una bendición. Y esta misma realidad de separación sentimental nos brinda una nueva oportunidad para ahorrar y para invertir más en uno mismo.
A veces, por estar más presente en los demás, descuidamos nuestra imagen hasta lucir gente vulgar y sin clase alguna. Bueno, pues ahora que eres libre debes cuidarte más, y no tan sólo con accesorios y un nuevo corte de pelo, sino cuidar también tu salud. Y bueno, si al fin de cuenta no logras dedicarte a los ejercicios físicos, al menos, ingiere alimentos saludables. En este momento transcendental de tu vida debes aferrarte un poco a la vanidad. ¡Qué más da, tú te lo mereces! ¿O no? ¡Claro que sí! Así que acicálate bien ahora y vete ahora mismo de compras y, luego regresa con dos o tres shopping bags repletos de cosas tan solo para ti, egoístamente para ti. No importa que el barrio critique tu vanidad momentánea. ¡Total, muchos de ellos ni comprenden bien lo que en verdad intentas hacer ni mucho menos por lo que estás pasando! Además, pienso que a muy pocos de ellos le importe un comino tu mundo interior.
Olvídate del mundo un poco, de lo que dirán de ti, y enfócate en ti, en tu mundo interior, en atender tu imagen, tu cuerpo, tu salud, tu espíritu. Cómprate ropa nueva, perfumes, accesorios, un libro de superación personal para que cuide la imagen de tus pensamientos. Repito, date un corte de pelo en boga o si deseas déjate crecer el pelo, pero siempre cuidando su apariencia; y claro está, a la altura de tu personalidad. Cuida tu porte y tu compostura. No camines como las personas derrotadas. Camina firme y con la frente en alto. Saluda a los demás con una sonrisa. Cuando hables no escupas frases de desaliento o de personas frustradas. Habla de cosas positivas y con sentido. Cuando te pregunte por tu ex, simplemente dile con aplomo: No sé. De ahí no pases, no des más detalles. Mucha gente hace preguntas sobre tu relación pasada tan solo por fastidiarte e intentar deprimirte. Estos tipos de personas son tan despiadadas que como no pueden darte muerte con un cuchillo, lo intentan con las palabras y sus comentarios, siempre cargados de socarronería y cinismo. Apártate de esos virus dañinos antes de que tu mente se infecte con la enfermedad de sus vocablos.
Recuérdalo, no te eches al abandono como un mendigo. Muchos desearían verte envuelto(a) entre harapos y cartones rotos. De hecho, no dudo que a tu ex pareja, en muchos de los casos y en lo más subrepticio de su alma, le agradaría verte con el rostro triste, los hombros caídos, el pelo desaliñado, la mira honda y mustia, y el caminar pesado y ruidoso. ¡No, nunca le des a demostrar a tu enemigo que luces derrotada! ¡Nunca!
Así que, es hora de invertir en la creación más especial de Dios: en ti. Pero no hagas esto con el fin de provocar vanamente a tu ex, como para que diga: “¡Diablos, lo que perdí!” Hazlo pensando en que tú mereces eso y mucho más. Hazlo porque te hará sentir bien y mejor. Hazlo porque eres lo máximo en este planeta. Hazlo pensando en que tú eres el puntito más brillante del Firmamento. ¡Claro que sí, esos eres tú: Un milagro de la naturaleza. Por eso, cuida tu imagen hoy mañana y siempre.

8- Mantén tu mente ocupada en algo positivo y productivo.

En esta etapa de convalecencia emocional debes procurar mantener tu mente ocupada en algo edificante y útil para tu vida. ¿Qué buscarás con esto? Pues alejar toda posibilidad de que los demonios de la melancolía entren en ti y te echen el vudú de la desesperación. ¡Nada de eso! Ponte creativo(a) y no le des tregua a la nostalgia. Ocupa tu tiempo libre en alguna actividad que te mantenga alejado(a) de los recuerdos infructuosos. Los recuerdos son a veces cuervos malignos que vienen a sacarte los ojos de la tranquilidad.
Bueno, para contrarrestar la melancolía empieza por hacer una lista de actividades a las que tú puedes dedicarte. Por ejemplo: Navegar en la Web, leer un libro de superación personal, practicar algún deporte, escribir proyectos, escuchar música clásica o movida a veces, ir a la playa o de compras. Graba en tu mente lo siguiente y repítelo todos los días de tu efímera existencia: “El mundo se divide en dos: Yo y los demás.” Recuerda que nuestros ancestros solían decir: “Cabeza vacía, talleres del Diablo.” Ya que sabes esto, no permitas que la rutina y las vacuidades de esta vida devoren tu ser, porque esto te hará pensar en la alocada idea de una absurda reconciliación. Todo el mundo tiene un don por dentro, descubre el tuyo (si no lo has hecho) y sácale provecho. Pinta, baila, canta, juega básquetbol, esquía, nada, lee, escribe un libro, únete a un grupo de voluntarios, en fin ocupa tu mente en algo útil y que te satisfaga.

9-Evita caer en el mundo de los vicios.

La tristeza que se siente por la pérdida de lo uno quería, combinada don una dosis de impotencia por no saber cómo recuperar aquello se fue, supuestamente para siempre, empujan muchas veces a las personas a refugiarse erróneamente en el mundo de los vicios, llámese estos vicios: alcohol, estupefaciente y hasta un exceso de melancolía se podría considerar en un tipo de vicio letal para el alma. Existe una frase popular, un tanto jocosa que dice: Me puse a beber para ahogar mis penas, y las penas aprendieron a nadar. Esto significa que el remedio resultó ser peor que la enfermedad. Lo malo de recurrir al alcohol o cualquier tipo de estupefaciente radica en el riesgo de que las células de tu cuerpo se acostumbren a la sustancia que éstas absorben. Peor aún, mientras tú le entras todo este tóxico al cuerpo, las neuronas de se van destruyendo por la fuerza destructora de los invasores letales que recorren por toda la sangre. Para decírtelo en un lenguaje más llano, lo único que estás haciendo con tu vida es atrayendo más rápido la muerte.
Y aunque es cierto que todos moriremos algún día, no es menos cierto que lo lógico sería que esa muerte no nos llegue tan rápido. Desde el mismo instante en que el ser humano es concebido en la matriz de una mujer, desde ese mismo instante se activan dos relojes contradictorios para ese ser humano: el reloj de la vida, el que va marcando cada feliz cumpleaños del ser humano, y el reloj de la muerte, el cual va marcando cada segundo que pasa nuestro fin último más a la tumba. Es decir, que desde antes de nacer, ya estamos muriendo. Por lo que nuestra formada de vida debe estar regida por todo aquello que nos prolongue la existencia: ingerir alimentos saludables, hacer ejercicios corporales, disciplinar las emociones, alimentar el espíritu de cosas positivas, etc. No por aquello que nos acelere la muerte: el alcohol, las drogas, ingerir comida chatarra, beber soda, el exceso de melancolía, la promiscuidad, llevar una vida desordenada y de peligro.
Cada quien tiene en sus manos su destino. Somos hombres y mujeres libres de elegir. Tenemos libre albedrio. Yo apuesto pues por la vida y no por la muerte. Mi apuesta no es de boca, sino de acciones. Por lo que para que te sumes al club de lo que votan por la vida, te sugiero que: no caigas en los excesos del alcohol, no caigas en el mundo de las drogas, ni mucho menos te dejes atrapar por el exceso de melancolía, o peor aún, no llegues a intentar con tu propia vida. ¡El suicidio es una cobardía de las más tontas! Es absurda la idea de devastar la vida en vicios nocivos. Y es estúpido pensar en la idea de quitarse la vida por alguien que muy probablemente en tu mismo velorio cortejará a otro (a). El amor es importante, muy importante, pero no tan sólo de amor se vive en este planeta. Hay miles de cosas temporales que podemos hacer para sentirnos bien con nosotros mismos, mientras preparamos en corazón para un nuevo amor. Tú vida debe ser un constante crear. Crear un proyecto, crear un buen libro, crear amistades, crear una relación más sincera con Dios. Crear trabajo productivo. Crear un nuevo tú. Crear, siempre crear. Siempre.

10-Ve haciendo lugar en tu corazón para un nuevo amor.

A pesar de que, con toda tu razón, en estos momentos no crees en el amor, o quizás muy poco, el amor sí existe y siempre existirá. El Amor nunca muere, sólo muere el amor que se sentía por esa persona a la que una vez entregamos nuestro corazón. Muere el interés, muere el afecto, muere el afecto, muere el respeto, muere la consideración, muere la admiración, muere el deseo, y hasta la pasión muere. Pero sólo por esa persona que no nos supo corresponder. Aun así, el amor siempre existirá en nosotros, aunque nos convirtamos en seres pesimistas, recelosos, y hasta egoístas, el amor nunca cambia, siempre está ahí en espera de que nos decidamos a abrir nuestro corazón para seguir amando.
Hay un refrán que dice: A rey muerto, rey puesto. Significa esto que la patria no debe desaparecer porque el hecho de que quien la gobernaba haya muerto. Significa que Nadie es indispensable en ningún trabajo o posición. Cuando un puesto o lugar queda vacante, sobra quien lo llegue a ocupar. Cuando un buen pescador se le escapa un pez del anzuelo nunca se lamenta por lo que se le va, ya que cuando levanta la mirada logra ver todo un amar imponente lleno de peces. En el amor, nadie es destino de nadie, sino amante accidental. Si vives en República Dominicana es natural que te llegues a casar con un(a) dominicano(a), pero si haces tu residencia permanentemente en China es pues lógico que llegues a casar con un(a) chino(a). ¿Es esto causa del destino? ¡Claro que no, es causa de las circunstancias! Por eso dijo una vez el filósofo español Ortega y Gasset: "Yo soy yo y mis circunstancias". Nada se da al azar. Todo es regido por la Ley de Causa y Efecto. Las piedras no caen del Cielo porque en el Cielo no hay piedras; alguien las arroja desde abajo.
La consigna sería pues: Borrón y cuenta nueva. Sin embargo, antes de tomar la decisión de enamorarte de alguien, debes darte un poco de tiempo para organizarte en todos los sentidos. Las heridas de la piel cicatrizan en semanas y meses. ¿Qué tiempo duran las cicatrices del alma para cicatrizar? Se toman más tiempo. ¿Cuánto? Pues esto depende de cada persona. Hay quienes se enfocan en olvidar lo pasado y seguir hacia delante con mucha seriedad, responsabilidad y madurez, pero hay otros que se empeñan en seguir haciéndose daño, no paran de poner los dedos en las llagas de un amor putrefacto. Muchas y variopintas son las razones por la que una persona no quiere resignarse a olvidar a su ex: Quizás por intereses creados que superan al amor en sí, como por ejemplo, una mujer quien llevando una vida más o menos cómoda provista por el hombre, de repente, no desea caer en la miseria. Hay quien le aterra la idea de que la sociedad lo fustigue sin piedad por el fracaso amoroso. Aquellos lo hacen por falta de autoestima - la mujer se encuentra muy vieja o en clara desventaja porque ya tiene un hijo o varios, el macho no quiere perder la piel joven y sensual de la hembra-. Estos otros por una marcada dependencia afectiva, o una obsesión súper enfermiza por alguien. En fin, cada quien tiene su propia historia, historia que por lo regular nunca revelamos a nadie. Son secretos que nos llevamos con nosotros a la tumba.
En ese tiempo de covalencia emocional, procura nunca caer en promiscuidad. Nunca busques a nadie por despecho. Nunca encasilles a todo el mundo de traicionero, ya que todos tenemos niveles de valores humanos diferentes. No andes por ahí con paranoia, pensando en que todo lo que se acerca a ti es para engañarte o algo así. No te pases tu vida tildando a los demás de más de lo mismo. No permitas que el pesimismo ni tu dolor se arruinen las oportunidades de amor que la vida te pone enfrente. Sí, date un merecido tiempito para organizar tu alma. Dale unas merecidas vacaciones al corazón. Déjalo que se sosiegue un poco.
Dicen por ahí que “Un clavo saca otro clavo.” Pero esta frase popularizada por el vulgo es aplicable a la madera, porque en el ser humano, los sentimientos no son clavos ni maderas. Es cierto que todos somos sustituibles en el puesto y en el corazón, pero para que se efectúe el cambio de un modo natural se necesita un tiempo prudente para que cuajen bien las emociones. Mira bien a quién le vas abrir tu corazón otra vez, y procura no convertirte en una Némesis -llena de odio y venganza-. No te conviertas en un(a) fiscalizador(a) de sentimientos. Ya que de ser así, lo único que lograrás con esa actitud, resentida y oscura, es profundizar más tu vacío existencial, ahuyentar a quien no tiene la culpa de tu pasado y echar a perder la conquista de la felicidad. Cuando te llegue el tiempo para otro amor, procura de no fastidiar la relación presente con el fantasma del pasado. Aprende a vivir el ahora con tu nueva pareja, tu futuro en el amor dependerá siempre de cómo sepas manejar tu presente.
No arruines tu porvenir en pareja con actitudes agrias y desconfiadas. Conjura todo lo que huela a pasado de tu corazón. Vive a plenitud el ahora con tu nuevo amor. Únete a ese nuevo amor sin renunciar a uno de tus tesoros más preciados en la vida: tu libertad. Ama sin encarcelar. Ama sin celos absurdos. Ama en libertad. Porque a pesar de los pesares, el Cupido no tiene la culpa de que los seres humanos no sepan cumplir con una regla tan sencilla en el amor: Amar sin dar la espalda. Ábrele el corazón a tu nuevo amor paulatinamente y déjalo que entre en ti espontáneamente. Y si un día se quiere ir, déjalo que se vaya. Total, el amor es libre como el viento. Nada es obligado.
En cuanto a los hijos -si es que los tiene-, no permitas que tu ex te manipule con ellos. Es un truco viejo ese el de hacerte sentir culpable de la situación de incertidumbre que padecen los hijos por motivo de la separación. ¡Patrañas! Es mejor para los hijos tener unos progenitores separados, viviendo cada quien por su lado en paz. Que unos progenitores conviviendo bajo el mismo techo sacrificados por los vástagos, pero que no se soportan y viven matándose como perros y gatos.
Esto, a parte de ser una experiencia frustratoria para los hijos es un mal ejemplo para sus futuras relaciones amorosas. Los hijos imitan. La única razón de peso para compartir tu vida con alguien es simplemente el amor. ¡Qué más da! Cuando los hijos estén mayorcitos entenderán la situación y la agradecerán. El resto déjaselo a tu abogado y al juez. En este sentido, ¡Qué viva la incompatibilidad de caracteres!
Procura que ni en esta vida ni en la otra nunca vender tu dignidad por nada en el mundo. La dignidad es lo único verdadero que tenemos en la vida. No permitas que nadie juegue con tus sentimientos. No permitas que nadie te manipule con nada ni nadie. No permitas que nadie te haga perder el tiempo en tu efímera existencia.
Ya sanadas la heridas del corazón, ahora es el momento exacto de darte una segunda oportunidad con alguien que quiera comprometerse contigo a buscar la felicidad compartida. ¿Cuántas veces debemos intentar amar y ser amado? ¡Todo el tiempo que sea necesario! ¿Cuántas veces debemos caer para poder encontrar alguien que nos sepa valorar en el amor? ¡Todas las veces que sean necesarias! ¿Algún día llegará a tocar el amor a nuestra puerta? ¡No lo sé! Pero lo que sí sé es que nunca debes dejar de intentarlo, sin miedo al fracaso, siempre con optimismo y buena disposición. Siempre dispuesto a jugárnosla una vez más por amor. Pon de tu parte y la otra parte te llegará por añadidura. ¡Vamos, tú puedes!

RÍE AHORA, AMA AHORA.

información sacada de http://literaturaquisqueyana.obolog.com/olvidar-ex-73339


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"Las palabras vuelan, lo escrito permanece"