AVISO: Puede contener spoilers
Becky Brandon —la compradora compulsiva más famosa del mundo— creía que la maternidad sería pan comido, y que tener una hija —una compañera con quien ir de compras para toda la vida— era un sueño hecho realidad. Pero la realidad resulta ser caprichosa... A la tierna edad de dos años, Minnie tiene un enfoque muy diferente del placer de ir de tiendas. Para empezar, demuestra una notable habilidad para sembrar el caos en cualquier sitio, especialmente en los grandes almacenes más selectos. Su palabra favorita es «mío» y si se queda sola frente al ordenador puede llegar a comprar dieciséis abrigos de la misma talla aporreando el teclado furtivamente.
Entonces, en el entorno familiar cunde la alarma: Minnie está a punto de convertirse en una loca-por-las-compras en versión reducida. Y por si esto no fuera suficiente, la crisis financiera mundial hace que la gente se vea obligada a recortar gastos, algo que, ay, afecta muy especialmente a los clientes de Becky. Además, Becky y su marido siguen viviendo en casa de los padres de ella, circunstancia que Becky está dispuesta a cambiar al precio que sea. No obstante, y ante tantos nubarrones en el horizonte que impiden que sus sueños acaben de cumplirse de una vez, Becky decide animar a todo el mundo organizando una gran fiesta sorpresa de cumpleaños para Luke.
Y es entonces cuando las cosas se complican realmente.
MI OPINIÓN:
Ya esperaba este libro desde hace mucho tiempo, todas las portadas me gustan.
Realmente adore a Minnie a su corta edad sabe pedir Taxi, comer en Starbucks y "tiendas" jajajaja de verdad es una monada me divertí mucho leyendo las incoherencias de Becky y las monadas de Minnie.
Sophie Kinsella es una de mis autoras favoritas de Chick-Lit.
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"Las palabras vuelan, lo escrito permanece"